Sabemos que algunos planetas pueden albergar vida, otros, en cambio, son hostiles por muchos motivos. Pero ¿quiénes les han prestado atención durante años? La respuesta es sencilla, astrónomos y astrobiólogos descubrieron las maravillas y los peligros de los mundos estelares.
De ellos nos han dicho que sus atmósferas llenas de gases son un impedimento para la proliferación de seres vivos, aunque éstos, como es sabido, pueden aparecer en entornos poco propicios como las fumarolas de los volcanes. También se ha comentado su climatología adversa, que la estudian desde la tierra con telescopios o desde las sondas espaciales. Pero ¿no os habéis parado a pensar en las tormentas polares tan habituales en la tierra? ¡y no ha desaparecido nadie!La exploración de nuevos mundos está en marcha, la carrera ha comenzado, y algunos ya están pensando en mí como nuevo astronauta para la misión a Marte, como en aquella película de Mat Damon, pero yo no lo veo.
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